La ilógica de vivir, lo irreal del momento. Una mala posición me hace pensar que no se donde estoy, me hace dudar y ser incapaz de encontrar la armonía en un mundo de tanta contaminación. Soy llevada por la brisa mas leve a la nada, a un mundo donde estoy yo, sentada en el suelo esperando por algo, que suceda un todo que me haga cambiar, un nada que me haga montarme en mi vida de nuevo. Y el tiempo no pasa, los días son todos iguales y más largos. No tengo ganas de nada, solo de pensar en ti, aunque no quiera. Lo dicho y hecho ayer no puede existir, no me da para entenderlo, no puedo. Para mi significa un cuento de Anónimo, que no me importa, no me viene ni me va, no me toca. No encuentro la comodidad, la razón ni la armonía. Y es que en tan poco tiempo llegaste a decir tanta verdad que era mentira, lo que fue esto siempre, una mentira encubierta por la mas tierna sonrisa y un beso para no dudar. Hoy no me encuentro, hay algo de mí en todas partes, todo lo que he sido y soy, entonces me busco y no estoy. Todos me tienen menos yo, estoy para todos menos para mi y no puedo dejar de decir que después de todo por lo que he pasado durante mi espinoso camino hasta el día de hoy, nunca me había pasado algo similar a lo que siento ahora. Son nuevos sentimientos estos, lo de hoy es algo nuevo a lo que no me puedo acostumbrar. Pero la inquietud es algo que me molesta, más que nada y todo. La desesperación de saber que tú no sientes nada y que la única que disimula aquí soy yo.
Nadie entendería el frío que siento y la ganas de gritar, dormir y soñar. Después no despertar para dejar de jugar a vivir, dejar de ser la trapecista del circo que saca a bailar a los payasos cada vez que algo sale mal, cada vez que no puede más. Necesito dejar de fingir ser la misma de antes, ni mis sueños son los mismos, tanto así que he cambiado desde mi forma de pensar a mi forma de caminar. Llegue al punto de no querer más ni querer que me quieran, quiero descansar sola, ser feliz sola ya que con los demás no puedo. Los invito a todos a un paseo a la mierda y si les gusta pueden quedarse, no se detengan. Eso si, no se me puede olvidar decirte y tu sabes a quien le hablo, a ti. Gracias por el momento, día o semana de felicidad que me diste. Viví en algo que da más que la ficción, con mucha acción y poco corazón, fue agradable y aunque no pueda creer que diga “fue”, porque para mi todavía es, aunque no pueda creer que ya todo ha terminado, aunque me hayas prometido considerable tiempo contigo y aun no pueda figurar cuanto es “mucho” para ti, te quise y fue un error que jamás volveré a cometer, te creí y es algo que nunca más volveré a hacer. Y aunque me encantaría hablar contigo puedo decir que tu te lo perdiste, si, ojala me extrañes mas de lo que yo te extraño, ojala me busques para no encontrarme, ojala me encuentres para no tenerme. Ni siquiera se me ocurre para qué hiciste todo esto, pero no me parece que haya una buena razón para mentir y matarme de un tiro, pero tu intento falló, ahora me levanto esperando algún día te arrepientas.
